Sunday, November 12, 2006

El Resplandor

Por algún lado leí la novela "El Resplandor" de Stephen King fué inspirada por el miedo que el autor tenía de "lastimar" a sus hijos.
Lo que el artículo no explicaba era la referencia a "lastimar". ¿Se refería a lastimarlos emocionalmente? ¿Físicamente?
Muchas de las historias que nos afectan profundamente suelen funcionar debido a los botones que manipulan internamente dentro de nuestra mente. Hansel y Gretel, por ejemplo, funciona debido a lo que está escondido en el subtexto. Es una historia que nos aterra porque lidea con nuestro horror al abandono de nuestros padres y al estar perdidos en una sociedad que jamás nos aceptará.
Por consiguiente "El Resplandor" aterra a la gente joven inconscientemente debido al temor de que sus padres los lastimen, y al mismo tiempo aterra a los padres tocando el botón de "no debo lastimar a mis hijos."
Pero entonces, y éste es mi punto: ¿Cuándo se justifica un abuso físico?
"Una nalgada a tiempo..." por ahí dicen.
¿Y el daño psicológico? Supongo que a eso se refería el señor King, a mi me aterra mil veces más ésta idea, nalgadas he dado y sincramente no han sido lo suficientemente fuertes como para mandarlos al psicólogo.
Pero, ¿el daño emocional? ¿Cómo sabemos a que puede llegar una simple acción cometida sin pensarse?
¿Cuántas veces no nos damos cuenta cuándo discutimos con nuestras parejas y los niños están presentes? ¿Cúantas veces no le recordamos a todita su familia al imbécil que se pasó el alto cuándo un par de orejitas están siempre muy al tanto? De ésas hay miles, nadie es libre de malos días.
Ojo chavos y chavas, no vaya a ser que por andar "neciando" con nuestros malos humores y hábitos estemos fomentando la creatividad de los nuevos "Maestros de lo Macabro" como por ahí le dicen al señor King.